Starship de SpaceX: Noveno vuelo termina en reingreso descontrolado
El noveno vuelo de prueba de la Starship de SpaceX, lanzado el 27 de mayo desde la base de Starbase en Texas, finalizó con un reingreso descontrolado a la atmósfera terrestre. A pesar de alcanzar el espacio, la misión no logró completar todos sus objetivos debido a problemas técnicos.
Éxito parcial en el lanzamiento y ascenso
El lanzamiento y el ascenso inicial fueron exitosos, pero la nave espacial comenzó a girar fuera de control debido a una fuga en el sistema de combustible. Esta situación impidió probar adecuadamente el sistema de reingreso con las baldosas de protección térmica.
Elon Musk, CEO de SpaceX, comentó en X: "¡Starship llegó al corte programado del motor de la nave, una gran mejora con respecto al último vuelo! Además, no hubo pérdida significativa de baldosas del escudo térmico durante el ascenso".
Pérdida del booster y reingreso fallido
Poco después de alcanzar el espacio, la etapa del booster, crucial para el reingreso de la nave, se perdió durante su regreso a la atmósfera. Además, la puerta de la carga útil no se abrió durante el vuelo. Según la compañía, los restos de la nave que no se desintegraron por el calor del reingreso cayeron en el Océano Índico.
Este incidente marca otro revés para el programa Starship de SpaceX, que ha enfrentado desafíos en pruebas anteriores. La empresa destaca la importancia de aprender de estos fallos para avanzar en el desarrollo de la nave.
Próximos pasos y objetivos
SpaceX está desarrollando Starship, el cohete más grande y poderoso jamás construido, con el objetivo de ayudar a la humanidad a establecerse en la Luna y Marte. La compañía planea realizar nuevos vuelos de prueba en las próximas semanas, buscando mejorar el diseño y la funcionalidad del cohete.
Dan Huot, del equipo de comunicaciones de SpaceX, declaró durante la transmisión del vuelo 9: "Estamos tratando de hacer algo que es imposiblemente difícil".