El huracán Melissa, ahora de categoría 5, ha puesto a Jamaica en alerta máxima, generando preocupación a nivel global. Con vientos sostenidos de hasta 280 km/h, la isla caribeña se enfrenta a un impacto devastador. Las autoridades han emitido advertencias urgentes sobre marejadas ciclónicas, inundaciones catastróficas y vientos destructivos que amenazan la vida de los residentes.
Testimonios desde la Zona de Impacto
Alexis, un turista argentino varado en Montego Bay, describió la situación a través de TN: "Afuera, ya está empezando a pasar". Relató que se encuentran resguardados en un hotel preparado para este tipo de emergencias y en contacto con la embajada argentina. Sin embargo, la fuerza del viento y la tormenta son evidentes al intentar salir de las áreas protegidas.
Impacto y Preparación
Montego Bay, un importante puerto de cruceros, se encuentra particularmente vulnerable. El gobierno jamaicano ha abierto refugios en todo el país, instando a la población a buscar resguardo. El ministro de Gobierno local, Desmond McKenzie, advirtió sobre la gravedad de la situación, señalando que "muchas comunidades no sobrevivirán a las inundaciones" y que "Kingston se encuentra en una situación extremadamente precaria".
Se pronostica que las marejadas podrían alcanzar picos de cuatro metros sobre el nivel del suelo en la costa sur de Jamaica. Después de Jamaica, se espera que Melissa se dirija hacia el norte, impactando también a Cuba, Haití y República Dominicana, países que ya han sufrido las consecuencias de este fenómeno meteorológico.
Más allá de Jamaica
Antes de llegar a Jamaica, el huracán Melissa ya había causado cuatro muertes: tres en Haití y una en República Dominicana. La situación sigue siendo crítica en estos países, con comunidades enteras en riesgo y la infraestructura severamente comprometida. La inestabilidad climática global hace que este tipo de eventos sean cada vez más frecuentes y devastadores, exigiendo una mayor preparación y coordinación internacional para mitigar sus efectos.
Mientras tanto, los turistas argentinos varados en Jamaica esperan con incertidumbre el paso del huracán, confiando en las medidas de seguridad implementadas y el apoyo de las autoridades consulares.