Brenda Micaela Barattini, la mujer que conmocionó a Córdoba al ser condenada por mutilar los genitales de su amante con una tijera de jardinería, ha obtenido la libertad condicional antes de lo previsto. Originalmente, debía permanecer en prisión hasta 2030, pero su buen comportamiento y participación en programas educativos dentro de la cárcel de Bouwer le permitieron acceder a este beneficio.
Un caso que generó controversia
El incidente, ocurrido en 2017, resultó en la condena de Barattini por tentativa de homicidio. La joven arquitecta atacó a su amante durante un encuentro íntimo, utilizando una tijera de jardinería. Tras el ataque, fue arrestada y posteriormente condenada.
¿Qué sigue para Barattini?
El juez de Ejecución, Facundo Moyano Centeno, otorgó la libertad condicional a Barattini, pero bajo estrictas condiciones. Estas incluyen fijar domicilio en Comodoro Rivadavia (Chubut), someterse a un tratamiento psicológico ambulatorio, reportarse mensualmente a la Agencia de Supervisión local y mantener una orden de restricción de contacto y acercamiento a la víctima.
Durante su tiempo en prisión, Barattini se dedicó al estudio. Completó diez materias de la carrera de Derecho, ocho de la Licenciatura en Letras Modernas, y diversos talleres de peluquería, panadería, pastelería y desarrollo de capacidades sociolaborales. También participó en cursos de Derechos Humanos, Derecho a pensar en libertad, Corretaje inmobiliario, Gestión de subastas, y formaciones en bibliotecaria, folklore e informática.
Este caso plantea interrogantes sobre la reinserción social de los delincuentes y la eficacia de los programas de rehabilitación en las cárceles. Mientras algunos celebran la oportunidad de Barattini de rehacer su vida, otros cuestionan si la pena impuesta fue suficiente y si la sociedad está preparada para recibirla de nuevo.
La decisión judicial ha reabierto el debate sobre la proporcionalidad de las penas y la importancia de la rehabilitación en el sistema penitenciario. ¿Es la libertad condicional un riesgo para la víctima y la sociedad, o una oportunidad para la redención y el cambio?