En un giro inesperado durante el partido entre Manchester United y Everton en Old Trafford, un jugador del Everton fue expulsado tras agredir a un compañero. La insólita situación ocurrió en el minuto 13 del primer tiempo, cuando Idrissa Gana Gueye, mediocampista del Everton, le propinó un cachetazo a su compañero Michael Keane en medio de una acalorada discusión.
¿Qué desató la furia de Gueye?
Todo comenzó tras una jugada defensiva fallida. Gueye intentó pasarle el balón a Keane, pero este no reaccionó a tiempo, lo que permitió que Bruno Fernandes del Manchester United tuviera una oportunidad de gol. Visiblemente frustrado, Gueye confrontó a Keane, y la discusión escaló rápidamente.
Las cámaras captaron el momento en que Gueye, tras un empujón de Keane, reaccionó con un golpe en la cara. El arquero Jordan Pickford intentó separarlos, pero el árbitro Tony Harrington ya había presenciado la agresión y no dudó en mostrarle la tarjeta roja directa a Gueye.
La expulsión dejó al Everton con diez jugadores durante gran parte del partido, aunque lograron adelantarse en el marcador con un gol de Dewsbury-Hall. A pesar de la desventaja numérica, el equipo demostró solidez defensiva y logró mantener la ventaja hasta el final.
Las disculpas de Gueye
Tras el partido, Gueye utilizó su cuenta de Instagram para disculparse por su comportamiento. "Quiero disculparme primero con mi compañero de equipo Michael Keane. Asumo toda la responsabilidad por mi reacción. También me disculpo con mis compañeros, el personal, los aficionados y el club", escribió el jugador. "Lo que ocurrió no refleja quién soy ni los valores que defiendo. Las emociones pueden estar a flor de piel, pero nada justifica tal comportamiento. Me aseguraré de que no vuelva a ocurrir".
El incidente ha generado un gran revuelo en el mundo del fútbol, destacando la importancia del control emocional en el deporte de alta competición. La Premier League es conocida por su intensidad, pero este tipo de incidentes son raros y condenados por la mayoría.
Lisandro Martínez, defensor argentino, estuvo presente en el banco de suplentes del Manchester United, marcando su regreso tras una lesión que lo mantuvo alejado de las canchas.